Matrimonio: construcción personal

Matrimonio: construcción personal

Rosario García Naranjo

EspañolEspañol | English English

El amor conyugal nos hace crecer uno al otro: al marido como hombre y a la esposa como mujer. El amor es artesanal. Conforme pasa el tiempo cada uno es para el otro, si hay amor, un maestro que va “sacando” la obra de arte que cada persona tiene adentro.

Fragmento Original

“Quizás la misión más grande de un hombre y de una mujer en el amor sea esa, la de hacerse el uno al otro más hombre o más mujer. Hacer crecer es ayudar al otro a moldearse en su propia identidad. Por eso el amor es artesanal. (La alegría del amor, n. 221)

Comentario

El amor conyugal es creador. Antes que, de los hijos, de los propios marido y mujer. Ellos, si se aman, se engendran uno al otro el mejor que tienen adentro.

Félix y Luciana van a cumplir 40 años de casados. Félix comenta sobre Luciana: “a la vuelta de tantos años me parece mentira ver a Luciana cómo ha cambiado. Tan renuente a maquillarse al principio, ahora, siempre bien arreglada. Tan impaciente cuando tenía muchas cosas que hacer en el día y ahora, toma las cosas con calma. Tan resentida y ahora, pasa por alto las pequeñeces y las no tan pequeñeces. ¡Claro! Trabajo que nos ha costado, bastantes conversaciones. Y distancias que acortamos. Y cesiones que nos hicimos en nombre de nuestra unión.  Ella siempre linda, noble, escuchando, poniendo de su parte.”

Ahora el turno es de Luciana: “Mi Félix. ¿¡¡Quién hubiera dicho que se iba a poner a lavar platos o a retirar la mesa o a planchar?!!! Pero él me veía atendiendo a los chicos y poco a poco fue ayudándome y aprendiendo. Antes creo que le molestaba verme cansada, callada, ahora me escucha, todo el tiempo que sea necesario y me hace ver las cosas con serenidad. Antes, renuente a ir a las reuniones de mi familia, ahora, me apura para no llegar tarde. Es como si en estos 40 años cada uno de nosotros hubiera sido un maestro para el otro”.

Temáticas: Paciencia