Educar paso a paso

Educar paso a paso

Paul Corcuera

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Educa con medida. Pide lo posible aquí y ahora. No exijas todo y de golpe. Es imposible y desanimas.  Recuerda que entre sembrar y cosechar media un tiempo, a veces largo.

Fragmento Original

“La educación moral implica pedir a un niño o a un joven sólo aquellas cosas que no le signifiquen un sacrificio desproporcionado, reclamarle sólo una cuota de esfuerzo que no provoque resentimiento o acciones puramente forzadas.” (La alegría del amor, n. 271)

Comentario

La formación de los hijos, que es distinta para cada uno, debe hacerse como en un plano inclinado, de menos a más, o poco a poco. Así como se aprende a caminar caminando, a nadar nadando, etc., debemos llevar a los hijos con metas cercanas alcanzables.

Si las metas que les planteamos, o ellos mismos se plantean, son muy altas, excesivas, sin plazo entre sembrar y cosechar, podrán desmoralizarse o pensar que no son capaces de nada loable. Los padres debemos tener la sabia inteligencia –con su generosa paciencia– para saber celebrar cada logro, por pequeño que parezca. El elogio ayuda para ir avanzando en el camino de la educación de los hijos.

La educación moral no es algo ajeno a lo que se hace todos los días. No hay acción humana que no tenga consecuencias morales. Por tanto, es en la dinámica misma de la vida ordinaria donde con acciones pequeñas se va formando a los hijos.

Temáticas: Paciencia