Al rescate del «ser» varón

Comentario

Rescatar la verdadera masculinidad del varón es algo imperativo para las familias de hoy. Y la misión de la mujer, que sabe ser esposa y madre, es insustituible para que un hombre se descubre y aprenda a ser un varón, un marido y un padre. Tengo la percepción que se le está dejando de lado y que él mismo no está haciendo lo suyo para retomar su crucial papel en la familia. Vemos mujeres que optan por ser madres solteras como opción de vida, hijos que crecen sin imagen paterna, varones que están solos y sin responsabilidades.

¿Ha sido buena una cultura y una sociedad que discriminan a la mujer, la tienen de menos, la acomplejan como inferior, y la relegan a un rincón? Desde luego que no, porque oscurece o niega a la mujer su enorme valor y su libertad para poder ser cuanto es una mujer.  Tampoco puede ser buena una cultura y una sociedad en la que el varón, como marido y padre, está ausente, carece de identidad y personalidad, no encuentra su lugar ni sus responsabilidades, o tal vez huye de ellas. Son situaciones que están empobreciendo las familias, provocando desequilibrios y carencias en los hijos, y deteriorando la sociedad. Varón y mujer, cuando se aman de verdad, se realizan reciprocamente como buenos esposos y padres.